El Vaticano advirtió a dos activistas peruanos de ultraderecha que podrían ser excomulgados por tratar de sabotear su investigación sobre los abusos dentro del Sodalicio de Vida Cristiana. Después de años de denuncias, la Iglesia Católica ha expulsado al fundador del Sodalicio, junto a otros diez miembros; sin embargo, no ha intervenido para que los agresores reciban sanciones penales y las víctimas obtengan justicia.