Argumentos como "mejorar los contenidos educativos" o "asegurar una mayor participación de los padres de familia" se repiten entre los opositores al género en distintos países de la región. Sin embargo, las discusiones terminan con el mismo objetivo: erradicar el enfoque de género y censurar la diversidad.
Equipo de redacción de La Mala Fe.
Uno de los más recientes ejemplos viene desde el Congreso de la República de Perú, con un parlamento con amplia mayoría antigénero que impulsa una iniciativa legislativa que busca intervenir en el currículo escolar del Ministerio de Educación (Minedu), poniendo en riesgo la permanencia del enfoque de igualdad de género y educación en sexualidad integral.
Este tipo de atentados contra el derecho a la educación de los niños y niñas, sin embargo, no son hechos aislados. Estas prácticas también se replican en otros países de América Latina, como en Brasil y Paraguay.
El congresista Esdras Medina es también miembro del colectivo antiderechos «Con mis hijos no te metas».
– Foto: Redes sociales de Esdras Medina.
El congresista Esdras Medina, miembro del partido Renovación Popular, del colectivo ‘Con mis hijos no te metas’ y pastor de la iglesia evangélica “Las Asambleas de Dios del Perú”, presentó recientemente el Proyecto de Ley (PL) 904 que busca “regular las acciones para que la elaboración de los materiales y recursos educativos a cargo de las entidades competentes del sector educación, se efectúe acorde con los principios y derechos reconocidos en la Constitución”.
Así, el artículo 3 de la iniciativa legislativa propone que se incluya a las asociaciones de padres de familia en el proceso de elaboración de los textos escolares y materiales educativos. El proyecto, entonces, busca limitar las funciones del Ministerio de Educación con el fin de tener el control sobre el currículo escolar.
A esta coyuntura adversa, se suma la intervención de la transnacional antiderechos CitizenGo, quienes respaldan el PL 904, afirmando que “es un derecho fundamental que tenemos los padres de familia en ser los primeros educadores de nuestros hijos”, desconociendo la rectoría del Minedu y del Estado peruano cómo garante de la educación en el país.
Proyecto de Ley 904 presentado por el congresista Esdras Medina, miembro de la bancada de Renovación Popular y presidente de la Comisión de Educación del Parlamento.
– Captura del documento.
Este PL fue aprobado en la Comisión de Educación del Congreso peruano, y podría ser debatido en pocos días por el Pleno. Con la aprobación de esta iniciativa se vulneraría el carácter laico del Estado, admitiendo posturas confesionales en la definición de las políticas públicas que debieran alinearse a los estándares de derechos humanos y compromisos de Estado con la educación de calidad.
Frente a este contexto, diversas organizaciones de la sociedad civil han manifestado su rechazo al proyecto y han alertado los riesgos que traería consigo.
“En el país, el Minedu es el que tiene la responsabilidad del proceso de los contenidos curriculares, los mismos que son aplicados por los profesores. La intención del grupo de ‘Con mis hijos no te metas’ es utilizar el pretexto de la opinión de los padres para impedir una educación científica, laica y con evidencias, que abone al desarrollo escolar”, sostuvo un pronunciamiento de Promsex.
En noviembre de 2021 en la ciudad del Salvador, en el estado de Bahía, un profesor fue denunciado ante la policía por hablarle a sus alumnos sobre identidades de género, racismo y diversidades sexuales en el Colegio Thales de Azevedo.
Ese mismo mes, el director de una escuela municipal de la ciudad de Resende, en el estado de Río de Janeiro, fue citado ante la policía para explicar la “exposición de los estudiantes” a conceptos como “ideología de género”.
Una investigación periodística del diario O’ Globo, en ese entonces, reveló que fue el Ministerio de la Mujer, Familia y Derechos Humanos de Brasil el que promovió de forma anónima las denuncias a través de la línea de atención enfocada en derechos humanos (Dial 100).
Para el profesor e investigador Marco Aurelio Prado, de la Universidad Federal de Minas Gerais, este tipo de prácticas significan una persecución contra los docentes que brindan educación con enfoque de género. “Una vez que llamas a la directora y a la maestra a declarar en un caso abierto por una denuncia anónima el debate de género en esa escuela se acaba. Esto muestra la ofensiva como política de Estado”, apunta Prado.
Desde los tribunales, sin embargo, existen fallos que defienden la educación con enfoque de igualdad de género. Uno de esos casos se dio el 24 de abril del 2020, cuando el Supremo Tribunal Federal declaró inconstitucional por unanimidad una ley del municipio de Novo Gama, en el estado de Goiás, que prohibía materiales educativos con información sobre género.
En mayo de ese mismo año, el Supremo Tribunal Federal también declaró inconstitucional una norma del municipio de Foz do Iguacu, en el estado de Paraná, que prohibía la enseñanza, materiales y actividades relacionadas al término género u orientación sexual. Ambos fallos reafirman el derecho a una educación orientada a erradicar la discriminación y prevenir la violencia infantil, enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados.
Recientemente, el Supremo Tribunal Federal emitió dos fallos en defensa de la educación con enfoque de igualdad de género.
– Foto: Supremo Tribunal Federal.
Otro de los países de la región en donde su sistema educativo se encuentra en peligro por los grupos antiderechos es Paraguay. En 2017, este país se convirtió en el primero del mundo en prohibir los temas de género en los colegios, luego de una intensa campaña de la organización cristiana estadounidense “Alliance Defending Freedom”.
Esta restricción se dio a través de una resolución ministerial, firmada por el entonces ministro de Educación, Enrique Riera, que dispuso “prohibir la difusión o utilización de materiales impresos como digitales referentes a la teoría y/o ideología de género en instituciones educativas dependientes del Ministerio de Educación y Ciencias”.
Para la abogada Elba Núñez, del Comité Latinoamericano para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem), en Paraguay “todo lo que tiene que ver con género está prohibido y satanizado”. Núñez, además, señaló que desde la Secretaría de Género de la Suprema Corte de Justicia, la Comisión de Equidad de Género del Congreso y el Ministerio de la Mujer, se emprende “una caza de brujas, incluso a los mecanismos institucionales que llevaban la palabra género en su nombre”.
Elba Núñez, abogada del Comité Latinoamericano para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem) en Paraguay.
– Foto: Facebook.
En ese contexto, Paraguay también es uno de los países de la región con mayor tasa de embarazo adolescente y violencia sexual de Sudamérica. Solo entre adolescentes de 15 a 19 años, ocurren 72 nacimientos por mil mujeres al año. De acuerdo al Ministerio Público de ese país, además, al día se registran un promedio de 8 denuncias de abuso sexual en niños, niñas y adolescentes.
En este portal damos alerta de los avances y las estrategias que el fundamentalismo y la agenda antiderechos implementan en los países de la región y resaltamos a las voces y propuestas que están dispuestas a combatirlos y que defienden los derechos reproductivos, la diversidad sexual y el enfoque de género.
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