En un comunicado, la Corte IDH informó que su sentencia se basó en la constatación de las afectaciones a varios derechos de Sandra Pavez, como a la libertad personal y a la vida privada. En ese sentido, la Corte IDH concluyó que Sandra fue tratada de manera diferente por su orientación sexual, lo que vulneró el principio de igualdad y no discriminación.
Por su lado, las autoridades de la Iglesia Católica en Chile se pronunciaron en contra del fallo de la Corte IDH. La Diócesis de San Bernardo, dirigida por el obispo Juan Ignacio González, calificó la sentencia como “confusa” y llena de “contradicciones”.
“Han intentado mantener vigentes principios opuestos, que le permitan no negar elementos esenciales, como el derecho de las confesiones a señalar quienes pueden hacer clases de religión, el de los padres a escoger la educación moral y religiosa de los hijos y al mismo tiempo, tener que aceptar (…) que la negativa a la profesora a continuar con las clases de religión, se ha tratado de una discriminación y que así no queda otro camino que condenar al Estado”, sostuvo la Diócesis de San Bernardo.
En el mismo sentido, el director jurídico para América Latina y el Caribe de ADF International, Tomás Henríquez, dijo que el fallo de la Corte IDH no respeta la libertad de religión ni la autonomía de la Iglesia Católica. “Esperamos que la Corte respete el carácter fundamental de la libertad de religión y creencia, que incluye la autonomía de las comunidades de fe para escoger a sus maestros y el derecho de los padres a que sus hijos reciban una educación religiosa acorde con sus convicciones”, dijo Henríquez.