Desde que inició el registro oficial del Programa de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires la cantidad de interrupciones legales del embarazo registradas aumentó un 3800% en la CABA, desde el 2014 al 2019.
Estas cifras ponen en evidencia la situación de clandestinidad a la que tenían que recurrir las mujeres para interrumpir sus embarazos, en comparación a la actualidad, hoy lo pueden hacer en instituciones públicas sin poner en riesgo su vida.
Asimismo, los datos demuestran compromiso del programa de la CABA, como política pública de salud, en la compra de todos los insumos incluyendo el Misoprostol, y los equipos de los centros de atención primaria de salud acompañando a todas las mujeres en la práctica del ILE.
Por su parte, en la provincia de Santa Fe se empezó a fabricar el Misoprostol, en enero de 2018, a cargo del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF). Este medicamento reconocido por la OMS como esencial en la salud pública para las Interrupciones Legales del Embarazo (ILE), se distribuye en los establecimientos de salud de esta provincia, abriendo la oportunidad de llegar al resto del país si obtiene la autorización de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (Anmat).