En medio de las protestas en Guatemala por la anulación de la inscripción de la única candidatura indígena a la presidencia, la alerta crece por la postulación de antiderechos a diferentes instancias del gobierno en las elecciones 2023.
Equipo de redacción de La Mala Fe.
A cuatro meses de las próximas elecciones presidenciales y congresales en Guatemala, miles de ciudadanos y ciudadanas participan en protestas exigiendo que el Tribunal Supremo Electoral permita la inscripción de Thelma Cabrera y Jordán Rodas como candidatos a la presidencia y vicepresidencia, por el Movimiento para la Liberación de los Pueblos —el único partido que postula a una mujer indígena. En ese clima polarizado, también genera alerta la presencia de candidatos y candidatas que sí cuentan con inscripción y que han demostrado una posición contraria a los derechos sexuales y reproductivos. Una situación que resulta preocupante por las constantes ofensivas de grupos antiderechos en Guatemala, con respaldo de la presidencia y del Congreso.
A continuación, exponemos algunas de las figuras más resaltantes en las candidaturas antiderechos que buscarán llegar al poder el próximo 25 de junio.
Entre las candidaturas a la presidencia de Guatemala, resalta Zury Ríos Montt, quien postula por la coalición conservadora Valor Unionista y es hija del dictador Efraín Ríos Montt, quien fue condenado por genocidio y delitos de lesa humanidad. Entre las acusaciones al general Ríos Montt está la violenta represión militar que devastó a pueblos enteros, compuestos en su mayoría por habitantes indígenas. Pese a ello, la hoy candidata defiende a su padre y ha declarado públicamente que falleció siendo inocente. La realidad es que luego de la condena, la Corte de Constitucionalidad de Guatemala dejó sin efecto el fallo basándose en un tecnicismo.
Zury Ríos Montt, hija del fallecido dictador Efraín Ríos Montt, busca ser presidenta de Guatemala. Está en contra del aborto y a favor de la pena de muerte.
Foto: Hispanos Press
Inicialmente la postulación de Zury Ríos Montt fue impugnada con el argumento de que existe una prohibición constitucional por la filiación con el dictador. Sin embargo, el Tribunal Supremo Electoral —el mismo que ha dejado fuera de la carrera presidencial a la única candidata indígena— no consideró que esa prohibición fuera aplicable. Actualmente, la candidata está a la cabeza de las encuestas, según el diario El País.
Cabe recordar que Ríos Montt ha expresado su oposición hacia el aborto y el matrimonio homosexual. En entrevista con el medio Prensa Libre, declaró que «La Constitución dice que se respeta la vida desde la concepción; no estamos a favor del aborto, pero sí de la planificación familiar» y que «El concepto de matrimonio por su origen de vida es entre un hombre y una mujer».
Esta es una posición similar a la de Jimmy Morales, exactor cómico, expresidente de Guatemala y actual diputado en el Parlamento Centroamericano (Parlacen), quien ahora postula al Congreso por el partido Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación). Años atrás, Morales —quien practica la fe cristiana evangélica— declaró que no cree en el matrimonio entre personas del mismo sexo y que aprobar una ley así generaría desorden «porque en Guatemala el 97% de la población tiene un pensamiento ético cristiano». Lo mismo expresó sobre el aborto.
En 2018, en la Asamblea General de la ONU, el expresidente Jimmy Morales señaló que Guatemala no está dispuesta a modificar sus tradiciones religiosas que favorecen a la familia «tradicional» y que son contrarias al aborto.
Foto: BBC
En estas elecciones, el partido FCN-Nación también promueve la candidatura de familiares de Morales. Se trata del hermano del expresidente, Samuel Morales, quien postula a la presidencia, y de su hijo José Manuel Morales, quien apunta a ser diputado por los Municipios de Guatemala. En 2019, ambos fueron absueltos del delito de simulación de actividades en el caso «Botín Registro de la Propiedad». La Fiscalía los acusó de emitir facturas falsas con las que supuestamente habrían defraudado al Estado por 12 mil dólares. Se pedía ocho y 11 años de cárcel para ellos, pero un tribunal determinó que no se habían beneficiado económicamente.
Otro conocido perfil antiderechos es Allan Rodríguez, expresidente del Congreso durante los primeros dos años del régimen de Alejandro Giammattei, quien ahora busca la reelección como diputado. Durante el tiempo que estuvo como cabeza del Congreso, se aprobó el Día por la Vida y la Familia, una iniciativa criticada por colectivos feministas por promover actividades contra el aborto. «En Guatemala todos somos provida, profamilia», declaró Rodríguez en un foro realizado por el argentino Agustín Laje.
Finalmente, destaca la presencia de Luis Hernández Azmitia, exdiputado que ahora es candidato por el partico FCN-Nación. Ha sido Consejero en la Organización de Estados Americanos (OEA). Anteriormente, postuló al Congreso con el Movimiento Reformador y formó alianza con el partido conservador Visión con Valores. Fue uno de los trece diputados que formaron el Frente Parlamentario por la Vida y se documentó su presencia en marchas y actividades de colectivos antiderechos como la Asociación La Familia Importa.
El exdiputado antiderechos Luis Hernández busca regresar al Congreso, donde fue parte de alianzas político-religiosas y tuvo incidencia en iniciativas contra el aborto y los derechos de las mujeres.
Foto: Captura Facebook
Como ha relatado anteriormente la Redacción La Mala Fe, en Guatemala existe una fuerte alianza antiderechos en todos los poderes del Estado. Estas elecciones no son distintas, pues vemos candidatos que se oponen a derechos fundamentales en carrera. Y peor aún, arriba en las encuestas.
En los últimos años, han existido peligrosas iniciativas impulsadas desde el Congreso, como la Ley de Protección a la Vida y la Familia (Ley 5272, luego Decreto 18-2022) que criminalizaba el aborto y los matrimonios entre personas de la comunidad LGTBIQ+. La organización Girls Not Brides también señaló que esta norma incrementaba el riesgo de matrimonios y uniones infantiles tempranas. El presidente Giammattei expresó su respaldo a la iniciativa, pero luego de la presión internacional, anunció que la vetaría.
En 2019, también se presentó la Ley para garantizar la protección integral de la niñez y adolescencia contra los trastornos de la identidad de género (Ley 5940), que proponía quitar el derecho a la autodeterminación de la identidad a la niñez y la adolescencia trans. Uno de los principales impulsores de la iniciativa fue Allan Rodríguez, actual candidato a diputado.
Así, en un país donde el 87% de los partidos políticos en Guatemala son liderados por hombres, las alianzas entre agrupaciones políticas antiderechos ponen aún más en riesgo el respeto a la igualdad, la diversidad y otros derechos fundamentales.
En este portal damos alerta de los avances y las estrategias que el fundamentalismo y la agenda antiderechos implementan en los países de la región y resaltamos a las voces y propuestas que están dispuestas a combatirlos y que defienden los derechos reproductivos, la diversidad sexual y el enfoque de género.
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