A través de teorías de conspiración, entre ellas, la de un supuesto plan internacional que pretende el control de la sociedad con motivaciones económicas, negar la existencia de la covid-19 a la que, además, consideran una farsa, los antivacunas crean así su narrativa para atraer personas.
Una encuesta hecha por MIT Covid Survey durante julio y noviembre de 2020, mostró que más del 11% de la población en países como Brasil, Venezuela, Perú, Bolivia, Guatemala, Honduras, México, Argentina, Colombia, Chile, Uruguay, no se pondría la vacuna.
A finales del 2020, según la red internacional de noticias de ciencia para el desarrollo Scidev.Net reportaba que las barreras contra la vacunación en América Latina eran el aumento de las dudas sobre su efectividad, la influencia de desinformación y las creencias religiosas.
Existe una organización internacional llamada Médicos por la Verdad, un grupo autodenominado como “médicos profesionales con una posición racionalmente crítica a la narrativa oficial y políticas de los gobiernos para contener la COVID-19. Se ubican en Perú, Argentina, Chile y otros países de Latinoamérica; en Europa en España y Alemania.